Ya hemos disfrutado de la Semana Santa y con ella hemos podido gozar de los primeros rayos de sol. Todos ya sabemos que es importantísimo protegerse bien del sol para evitar los efectos dañinos que este produce, pero también es necesario tomar el sol para evitar déficits vitamínicos. Por este motivo, es importante tener cautela y tomar el sol con sensatez y moderación.
Ya os iré explicando a lo largo de esta temporada trucos y consejos para sacar el máximo provecho a tomar el sol sin que sea perjudicial. Y hoy me quiero centrar en como determinados alimentos nos pueden ayudar a protegernos del sol y lucir un bronceado sano y saludable.
El primer consejo que quiero daros hace referencia a frutas. Y es que algunas frutas como los albaricoques, las cerezas, el melocotón, el melón ayudan a que la producción de melanina en el cuerpo se haga de forma más natural. El tomate, la sandía, el pimiento rojo y la papaya tienen un contenido en licopeno, un pigmento vegetal que aporta su característico color a estas hortalizas y frutas y ayuda a prevenir el daño que el sol pudiera producir.
Otros, como la calabaza, las verduras de hoja verde (espinacas, acelga, berro, rúcula…), la zanahoria y los espárragos son ricos también en betacaroteno, precursor de la vitamina A (que una vez ingeridos se transforman en vitamina A) y tienen además componentes antioxidantes, por lo que también ayudan a preparar la piel para la exposición solar.
Con este consejo no solo pondremos sabor a nuestra vida sino que también, ¡luciremos un envidiable color este verano!
¡No perdáis de vista el blog porque ya os iré explicando más consejos!