Cuando un paciente viene a mi consulta con una piel grasa observo que la piel brilla, que sus poros están dilatados, que presenta puntos negros, especialmente en las zonas centrales del rostro, nariz y frente. También puede presentar quistes milium, que son granitos con bolitas blancas. En los casos más severos se nota una capa grasa al tocar la piel.

Cada persona es un mundo y por ello, se estudia el caso en concreto, ya que cada respuesta va a ser 100% individual y adaptada a las necesidades de la piel del paciente. El objetivo siempre será eliminar el exceso de secreción sebácea y afinar la capa más superficial de la piel, convirtiendo la piel gruesa en una piel mas fina.

Las personas que se tratan la piel grasa, piensan que al tenerla así no necesitan hidratarla, y esto es un error. Podemos encontrar pieles grasas totalmente deshidratadas, que suelen descamarse en las partes centrales del rosto: aletas de la nariz y nacimiento de las cejas, en ocasiones hasta producen una dermatitis seborreica y por ello es fundamental elegir los cosméticos adecuados con texturas ligeras y elementos matificantes. Siempre aconsejo al paciente el producto que le viene bien a su piel.

La técnica

La solución que presento al paciente para controlar la grasa en la piel consiste en actuar desde el interior para controlar la seborregulación, con el objetivo de disminuir y evitar el exceso de secreción grasa. Los tratamientos que utilizo para la piel grasa son combinados, es decir que utilizo varias técnicas como el peeling y la dermoabrasión.

El peeling médico actúa directamente en la causa del problema y la dermoabrasión elimina de forma mecánica, por arrastre, la capa más superficial de la piel, eliminando las células muertas.

La combinación de ambos tratamientos y la elección de los productos cosméticos adecuados, van a conseguir solucionar el problema, consiguiendo una piel mas fina y uniforme, disminuyendo la frecuencia brotes, atenuando las marcas de acné y haciendo desaparecer los puntos negros y los quistes de milium.

Duración

Los resultados del tratamiento no se aprecian en una sola sesión, pero después de dos meses, si el paciente sigue todas mis recomendaciones, se observan cambios espectaculares y duraderos.

Para este tratamiento, aconsejo que se lleve a cabo en un período de dos meses, en el que se irán realizando varias sesiones con efectos definitivos si se siguen las recomendaciones. No suelen tener efectos secundarios, excepto en algún caso, en el que podemos observar que la cara se pela un poco por el efecto del peeling. Transcurridos estos 2 meses podemos asegurar que solucionamos el problema y conseguimos una piel más fina y sin grasa.

* El número de sesiones y su duración dependerán de la severidad de cada caso.